Virginia Tech y los gringos locos

La matanza de Virginia Tech, donde 33 personas fueron abatidas al parecer por un sólo sujeto, nos recuerda que Estados Unidos es algo más que el país de las oportunidades.
Es también el país de gente que ni se inmuta en tomar un arma y resolver sus carencias y problemas a punta de balas, sangre y rabia.
Pero cómo una sociedad como la norteamericana puede decirle a su gente que aquello no es el camino. Los números de Virginia Tech son similares a lo que ocurre en un día normal en Bagdad y sus alrededores. Claro que nadie repara en lo que está ocurriendo en Irak, donde la violencia es pan de cada día.
NO ES MENESTER DE ESTE AUTOR EQUIPARAR O EMPATAR MUERTES.
Pero Estados Unidos tiene un problema, claro está.
Porque lo que acaba de ocurrir deja a los tipos de la escuela Columbine como bebés de pecho.
América Latina es un lugar donde cualquiera que presione ligeramente hallará pus de distinto tipo, pero acá no vemos imágenes tan aterradoras como las que recorrieron hoy el mundo.
Ojalá los gringos entiendan de una buena vez que la violencia no los conducirá a ningún lado.
Y que las familias de todas esas víctimas, jóvenes que sólo querían estudiar y prepararse para salir adelante en una sociedad desgarradoramente violenta, encuentren la paz que hoy escaseó en aquel campus.